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Desde principios de año se sabe que River busca centrodelanteros en el mercado y a partir de ahora, con el equipo ya clasificado a octavos de final de la Copa Libertadores, la idea vuelve a salir a la luz con un libro de pases que arrancará formalmente en 10 días pero que ya se mueve aún en las vísperas.

En Núñez hay un futbolista que genera consenso entre la dirección deportiva a cargo de Enzo Francescoli, secundado por Leonardo Ponzio, y el cuerpo técnico de Martín Demichelis: Adam Bareiro.

Hace rato se conoce el interés del CARP por el punta paraguayo de San Lorenzo, pero con el paso de los días desde las oficinas del Monumental se decidieron en jugar las primeras fichas para intentar incorporarlo lo antes posible: River hará un intento formal en las próximas horas para quedarse con el delantero de 27 años que es una de las figuras del Ciclón, a quien ven desde el club como un hombre de jerarquía para reforzar el ataque pero, también, una buena oportunidad de mercado. Y es que en su última renovación de contrato con Boedo, Bareiro, puso como condición una baja considerable de su cláusula de rescisión, que pasó de u$s 7.000.000 a u$s 3.500.000.

Que Bareiro tenga un número de blindaje accesible en términos de mercado para la economía de River no quiere decir, claro, que allí esté la llave de una potencial operación: existe desde siempre un acuerdo tácito entre clubes argentinos de no forzar transferencias activando las cláusulas de salida. En todo caso, esa cifra sí es un valor que orientará las negociaciones porque es también el dinero que le podría ingresar a San Lorenzo si un equipo del exterior quisiera llevárselo con la anuencia del jugador.

Desde River advierten que las posibilidades de fichar a Bareiro también dependerán de otros factores, pero uno en especial: si el Ciclón logra clasificarse a octavos de final de la Libertadores (necesita un empate en San Pablo contra Palmeiras el próximo jueves 30/5 y hasta podría entrar perdiendo si Independiente del Valle no derrota como local a Liverpool) la viabilidad de una transferencia bajará naturalmente por lo costoso que sería en el orden político para la CD que comanda Marcelo Moretti desprenderse de una figura y reforzar a un posible rival en los playoffs de la CL.